¿Deberías dirigir el servicio de lavandería internamente?
A menudo, las empresas subcontratan el servicio de lavandería a compañías especializadas. Lo hacen para evitar gastos financieros y de organización derivados de actividades que consideran menos estratégicas o demasiado complejas para gestionarlas internamente. ¿La subcontratación es una buena idea en todos los casos? Podremos decidirlo analizando los riesgos vinculados a externalizar estos servicios y proponiendo una forma de puntuar el valor estratégico de dicha actividad.
Costes a largo plazo de la subcontratación del servicio de lavandería
Coste a largo plazo: deberías valorar el volumen del servicio de lavandería que debes prestar. La subcontratación cuesta menos, pero solo a corto plazo; a largo plazo se convierte en un coste lineal que se come una parte fija y sustancial de los ingresos. Esto se hace aún más evidente si tienes en cuenta que algunos equipos de lavandería presentan ratios muy favorables entre el coste de compra y el coste de explotación, por lo tanto se acorta el tiempo de amortización de la solución. ¿Cuándo deberías considerar esta posibilidad? Cuando tu negocio sea lo bastante grande como para incorporar una pequeña lavandería y la relación entre el servicio y los ingresos sea bastante estable. Por ejemplo, una cafetería grande y consolidada donde, a mayor número de clientes, más tienes que lavar. En este caso puede ser más conveniente gestionar el servicio de lavandería internamente si se eligen con cuidado equipos:
- Fáciles de entender y manejar (ergonómicos)
- Con bajos costes de explotación
- Con un servicio postventa fiable que ayude a evitar costes y parones imprevistos
Riesgos del control de calidad de los servicios de lavandería
Sin duda, los servicios de lavandería profesionales que ofrece el mercado pueden hacer su labor con fiabilidad, pero algunas empresas necesitan algo más. Si para tu negocio es fundamental la calidad de la limpieza, quizás debas pensar en internalizar estos servicios. Por ejemplo, un hotel boutique de lujo, aunque sea pequeño, no puede asumir el riesgo de tener unos servicios de limpieza deficientes o de baja calidad, y podría beneficiarse de tener más control sobre sus operaciones de lavandería.
Cambios constantes en las necesidades de lavandería
Subcontratar el servicio de lavandería implica tener que negociar plazos de entrega y cantidades. Si tu negocio tiene dificultades para predecir picos en la actividad de lavandería (pongamos, por ejemplo, una residencia de mayores durante el brote anual de gripe), un proveedor externo podría no tener capacidad suficiente para mantener la calidad de lavado y los plazos de entrega de la ropa de cama.
La cuestión de la sostenibilidad
Si la sostenibilidad es importante para tu empresa o tu marca ha adoptado valores de conservación del medioambiente, internalizar el servicio de lavandería puede darte control sobre el impacto ambiental de tus operaciones de lavado; nunca puedes tener completa seguridad del respeto al entorno de un proveedor, a menos que tengas la posibilidad de elegir uno certificado (normalmente más caro). Si gestionas internamente el servicio, puedes seleccionar los equipos más ecológicos, por ejemplo, lavadoras comerciales que reduzcan el consumo de agua o tengan dosificación automática para asegurar una buena limpieza con el mínimo uso posible de sustancias químicas.